La presidenta de la Cámara de Industrias y Producción de Guayaquil, María Paz Jervis, expresó su rechazo a un apagón programado de cinco días en tres sectores industriales de Quito debido a la crisis energética que afecta a Ecuador.
El Gobierno anunció un aumento en los cortes de electricidad por una sequía histórica que ha afectado a las centrales hidroeléctricas. Estos cortes, que llegan a durar hasta 12 horas diarias, afectan tanto a hogares como a industrias, que enfrentarán un apagón total de 24 horas al día la próxima semana.
Jervis manifestó que desconectar la industria por 24 horas afecta gravemente al empleo y la economía de las familias. La Cámara de Comercio de Quito estima que cada hora sin electricidad supone pérdidas de 18 millones de dólares, acumulando pérdidas entre 3.000 y 3.500 millones desde el inicio de las restricciones.
Las pequeñas tiendas y mercados han visto una disminución del 40-50% en sus ventas, lo que equivale a 5 millones de dólares diarios. La CCQ advirtió la importancia de proteger las ventas de diciembre, que representan el 15% de los ingresos anuales y alcanzan más de 10.000 millones de dólares.
Ecuador tiene un déficit de 1.000 megavatios en su matriz energética, dependiente en un 70% de centrales hidroeléctricas. El Gobierno intenta poner en marcha la central hidroeléctrica de Toachi-Pilatón y gestionar la importación de energía desde Colombia.
Actualización: En medio de la crisis energética, las industrias ecuatorianas han adoptado diversas estrategias para mitigar el impacto. Muchas empresas han recurrido a la instalación de generadores eléctricos, aunque esto ha incrementado sus costos operativos en un 486%. Además, el Gobierno ha firmado contratos para sumar 632 megavatios de generación térmica, con la esperanza de reducir los apagones programados. Sin embargo, los gremios empresariales continúan presionando por soluciones más sostenibles y a largo plazo.
El Gobierno de Ecuador anunció un apagón para algunas industrias de alto consumo energético desde el 15 de diciembre hasta fin de año. La medida afecta a industrias del grupo de Alto Voltaje 1 (AV1) y Alto Voltaje 2 (AV2), que son las mayores consumidoras de electricidad del país. Esta decisión busca reducir los cortes de luz en el resto de la población.