Relatamos el caso de una menor de 15 años de edad que ve truncado su derecho a la educación; a 30 días del flamante inicio de las actividades educativas inauguradas con bombos y platillos por las autoridades gubernamentales de turno, existen casos no resueltos que merecen ser contados, denuncias que debemos reclamar.
Contrario a las frases recurrentes de los gobernantes el tema de nuestra nota no auspicia un «proyecto de vida continua» ya que la estudiante de bachillerato (La llamaremos Ana) al cumplir con los estándares de un sistema educativo caduco: no mantuvo el mejor desarrollo académico. Hoy las circunstancias ponen en riesgo su preparación que tiende hacia el abandono de sus estudios.
Sus padres tras buscar orientación y apoyo en instituciones externas, se encuentran con informes psicopedagógicos donde resulto que Ana tiene necesidades educativas específicas en ciencias exactas las que el colegio Brethren pudo evidenciar, sin haber actuado con las debidas adaptaciones curriculares ni el refuerzo académico óptimo en estos casos, el día 23 de julio de 2024 inicia un oficio hacia las gestores educativos.
La unidad educativa se limitó a informar la perdida del año lectivo 2023 – 2024 sin que se cumpliera por parte del DECE con los procesos:
Detección | Intervención | Derivación | Seguimiento
Se continúan vulnerando los derechos de Ana ya que las autoridades del área, dentro de un burocrático sistema financiado por la ciudadanía ecuatoriana se mantiene «a la espera de la resolución de la junta distrital que hace más de dos meses no da respuesta al caso 604015» para determinar por fin: a que año de estudios debe ir la estudiante.
Muy al contrario de una actitud vocacional humana lo único que han recibido sus padres es un trato hostil por parte de las autoridades que argumentan: «Uds. están acostumbrados a hacer este tipo de cosas para pasar el año» la emisión de este tipo de juicios de valor afectan el bienestar integral de Ana y su familia.
"Un sistema educativo caduco burocrático y mediocre no define a ciencia cierta si la menor se debe quedar en 1ero de bachillerato o pasa al siguiente nivel"
Esta situación pone en evidencia el funesto espíritu de cuerpo con el que se manejan las instituciones del estado como es el caso de las unidades educativas ecuatorianas.
Son decenas de casos a nivel nacional es las mismas circunstancias, las que estamos investigando para próximas entregas.